La Playa de Bolonia y su duna, una de las últimas playas vírgenes
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La playa de Bolonia es una de las últimas playas vírgenes del sur de la península ibérica, está frente a la ciudad marroquí de Tánger. En la zona oeste de la playa se encuentra la duna natural de Bolonia.
Se trata de una playa de arena fina y blanca, de aguas azules, frías y cristalinas. Tiene una longitud de unos 3800 metros y una anchura media de 70 metros. Cuando sopla el levante puede ser molesto, por lo que deberemos buscar una zona donde el viento venga del mar. El grado de ocupación suele ser alto, cuenta con servicio de salvamento y dispone de aseos públicos.
La duna de la Playa de Bolonia
En la zona oeste de la playa se encuentra la duna de Bolonia, Monumento Natural declarado en 2001 y de gran importancia ecológica.
Se trata de una acumulación de arena de más de 30 metros de altura y más de 200 metros tierra adentro, en una anchura de unos 500 metros.
El final de la duna es más o menos estable, en continua lucha entre los pinos por crecer y la arena por avanzar, pero no avanza continuamente, ya que la altura de la duna sobrepasa la de los árboles y el fuerte viento lleva la arena sobrante lejos de la duna.
